Es por eso que unido al mito de los devoradores de almas vemos sobresalir la presencia de dos fenómenos estudiados en la actual paraciencia: bilocación y viaje astral.
Aquél era esa clase de agotamiento endorfínico que nace del deporte y de las experiencias únicas, del típico viaje magallánico en el que has descubierto nuevos finisterres.